El desarrollo urbanístico y arquitectónicos de las edificaciones es importante para el constante avance a ciudades mejoradas que puedan brindar una mejor calidad de vida a la población presente y del futuro. Es por ello, que cada día los arquitectos buscan mejorar e innovar, construyendo la mejor cuidad del futuro.
Cada ciudad tiene su sello arquitectónico propio, pero todas enfocadas en mantener un buen desarrollo social, sustentable y amigable con el medio ambiente, para garantizar un futuro prospero a todas las generaciones venideras y que puedan seguir fortaleciendo las cimentaciones con los avances tecnológicos venideros.
Que son las ciudades
Las ciudades se originaron cuando el hombre comienza a abandonar su estado de cazador y nómada, a agricultor; sedentarizando al hombre para tomar el control de la producción de la tierra para colonizar pequeñas aldeas que luego fueron formando las primeras ciudades.
Las primeras muestras de arquitectura se elaboraban para el abrigo de la comunidad y para organizar los espacios; esto a través de construcciones de madera simples de cuatro paredes con tejados de dos aguas, lo que forma una cabaña primitiva, que aun se puede observar en pueblos aborígenes, africanos o amerindios.
Cabañas, chozas, cavernas artificiales, palafitos, crannogs y terramaras son algunas de las construcciones con las que más tarde comenzarían a edificar las ciudades en España y el resto del mundo; pero, a medida que las comunidades fueron evolucionando y aumentando, las ciudades tuvieron que modificar su arquitectura colonial para aferrarse a una militar con murallas, por las amenazas bélicas que comenzaban a desarrollarse en la época.
Ahora, en la actualidad, los términos han cambiado un poco, puesto que, se considera una ciudad a aquella que alberga una población de más de 10.000 habitantes que viven un una misma zona urbanizada y edificada donde se realizan labores industriales, comerciales y de otras actividades del sector terciario. Las ciudades actuales se caracterizan por tener diversos medios de comunicación, centros comerciales, atractivos turísticos, organismos estatales, financieros y políticos, un buen desarrollo de la infraestructura con edificaciones residenciales, comerciales, educativas y industriales.
Todos los servicios públicos disponibles, un sistema vial y diversidad en ofertas de empleo. Ahora bien, en cuanto a arquitectura, las ciudades están compuestas por corrientes modernas estéticas que utilizan nuevos derivados del acero y hormigón armado para proyectar y construir edificaciones para mejorar los espacios para la vida y actividad humana.
La ciudad del futuro
La revolución digital ha transformado el mundo y las ciudades, tal que, smart cities o ciudades inteligentes, son el nuevo desarrollo sostenible y respetuoso con el ambiente; gracias a las tecnologías empleadas que buscan una ciudad autosuficiente energéticamente junto a energías renovables, sistemas eléctricos y residuos inteligentes que sean capaces de mantener una ciudad ecológica.
Paneles inteligentes que sean capaces de abastecer el alumbrado publico con tecnología LED en toda la ciudad es uno de los principales ideales que debe tener la ciudad del futuro, puesto que esto supone un gran ahorro en electricidad al año. Además de esto, el wifi por todas partes es algo fundamental, para poder sentarse a trabajar conectado en algún parque, plaza, transporte público, paraderos de buses y bibliotecas.
La movilidad debe airar el ambiente, por lo que, transportes públicos y privados eléctricos deben ser el objetivo, para así, reducir la contaminación atmosférica, calentamiento global y el efecto invernadero; pero todo esto solo será posible si logramos encaminar a un futuro sostenible con la creación de grandes metrópolis con inteligencia artificial que pueda ofrecer una alta conectividad y autonomía.
Para que, su autonomía permita que todo quede mucho más cerca y que su plan de movilidad funcione, teniendo como clave, acortar el tiempo de viaje de un lugar a otro, para necesitar menos un automóvil propio, si no, utilizar otros medios como bicis, caminar y tomar transporte público, sobre todo para ir al trabajo diariamente.
Vivir una ciudad al aire libre con un microclima controlable es una de las metas para las ciudades del futuro, tal que, se deben incorporar pavimentos inteligentes que tengan calefacción e iluminación para controlar un poco el clima frío o caluroso en algunas regiones. Asimismo, un sistema permitirá controlar de forma digital las brisas frescas, las horas de luz y el viento frío, esto con ‘techos transparentes’ que pueden abrirse o cerrarse para cubrir los edificios.
La arquitectura de los edificios debe ser inteligente y flexible para poder moverse y reemplazase fácilmente, para poder utilizar las cimentaciones de diferentes maneras a lo largo del tiempo; además, en la construcción de las edificaciones debe de reafirmarse planes de energía para prepararse y dar la talla ante el crecimiento demográfico y el cambio climático.
Las ciudades del futuro deben ser resistentes como New York que es un ejemplo de una ciudad moderna con rascacielos e infraestructuras digitales que innovan el área metropolitana, tal que, medidores de agua, energía, kioscos de telemedicina y compactadores de residuos permanecen conectados a internet para mejorar el acceso a la comunidad de los servicios municipales.
Rotterdam es una ciudad del futuro, muy modernizada y automatizada en el área industrial y de transporte; tal que la red de movilidad urbana debe ser renovada constantemente, para tener un transporte público consolidado, que maneje tarifas de pago automatizadas. Por otra parte, la energía se debe reutilizar y emplear edificaciones que refrigeren la comunidad, pero que, mantengan una arquitectura urbana futurista.
Torres eólicas modeladas ayudarán a empujar la brisa fresca por las calles de la ciudad par mejorar la región y no tener que recurrir a aires condicionados como método de refrigeración tradicional, pues esto traería más consecuencias y contaminación, lo que, va en contra del ideal de las ciudades futuristas.
Para concluir, la ciudad del futuro deberá de cumplir con todas las propuestas anteriormente descritas, pero, sobre todo, debe ser ecológicamente estable, puesto que, de seguir con la alta tasa de contaminación y consumo energético que genera las ciudades actualmente, el ecosistema estará en riesgo en un futuro cercano; por lo que, actuar desde ya con la creación de ciudades ecológicas y digitales es la mejor innovación para el futuro del ser humano.